SOBRE LA PERTINENCIA DE MI FORAMACIÓN PEDAGÓGICA
LA RURALIDAD
LA RURALIDAD
Palabras clave: contexto, cultura, ruralidad, formación, historia, preexistir.
Mi nombre es Daniela Gallego, soy maestra en formación de la Escuela Normal Superior de María de Rionegro Antioquia; actualmente realizo mi práctica pedagógica en una sede de la misma, "Santa Ana de la vereda Ojo de Agua". He querido reflexionar sobre la pertinencia de mi formación pedagógica y es precisamente este el tema que me ocupará durante el desarrollo del presente texto.
Me gustaría empezar por mencionar los cuatro pilares básicos sobre los cuales se cimenta la misión de la institución:
· Formar maestros para la ruralidad,
· Capacitados para el trabajo con modelos educativos flexibles,
· Y con poblaciones urbano-marginales,
· Para los niveles de preescolar y básica primaria.
Es entonces como he querido partir del punto número uno “Formar maestros para la ruralidad” como epicentro doble de desarrollo del escrito y eje dinamizador sobre la pertinencia del programa.
Colombia se está transformando a una nueva visión de ruralidad, esto porque actualmente resultaría un tanto descontextualizado caracterizar la zona rural como una zona de difícil acceso cuando día a día las vías de comunicación se vuelven más numerosas; afirmar que es una zona totalmente agrícola, cuando se experimenta la industrialización de las mismas; plantear la pobreza como generalizada, cuando se ven en ellas viviendas de altos estratos socioeconómicos; estigmatizar los servicios públicos a escasos e inadecuados, cuando inclusive se tiene acceso a gas e internet. Estas solo por mencionar algunas de las características que se han venido replanteando con la nueva visión de ruralidad.
Con lo anterior no quiero hacer una generalización de todos los contextos, sin embargo y aunque muchas zonas rurales aun viven en el olvido, son muchas más las que a causa de la industrialización y diferentes actividades económicas atraviesan por un proceso de transformación simultánea en un sinnúmero de aspectos, incluida claro está, la educación.
Es por esto que el maestro debe estar preparado para asumir la multiculturalidad de cada contexto en el cual se desempeñe, pues aunque se desenvuelva en una zona urbana; hay ruralidad en el niño que viene de una vereda, hay ruralidad en el niño que para desplazarse hasta la escuela requiere de mucho tiempo, hay ruralidad en el niño desplazado, hay ruralidad en el niño que trabaja la tierra, hay ruralidad en el niño que ha sido afectado por la violencia… de esto se deducen dos ideas muy importantes:
· “en todo contexto hay tintes de ruralidad y el maestro debe estar preparado para ello”,
· “el contexto llega a clase con el niño”.
Y guardando relación con las anteriores ideas, propongo la siguiente frase para invitar a la reflexión:
“Los niños no son solo sujetos aisladamente, son una historia y un contexto que los preexiste, contexto que llevan consigo siempre”
María Daniela Gallego. Formación Complementaria Nivel III A
Me gustaría empezar por mencionar los cuatro pilares básicos sobre los cuales se cimenta la misión de la institución:
· Formar maestros para la ruralidad,
· Capacitados para el trabajo con modelos educativos flexibles,
· Y con poblaciones urbano-marginales,
· Para los niveles de preescolar y básica primaria.
Es entonces como he querido partir del punto número uno “Formar maestros para la ruralidad” como epicentro doble de desarrollo del escrito y eje dinamizador sobre la pertinencia del programa.
Colombia se está transformando a una nueva visión de ruralidad, esto porque actualmente resultaría un tanto descontextualizado caracterizar la zona rural como una zona de difícil acceso cuando día a día las vías de comunicación se vuelven más numerosas; afirmar que es una zona totalmente agrícola, cuando se experimenta la industrialización de las mismas; plantear la pobreza como generalizada, cuando se ven en ellas viviendas de altos estratos socioeconómicos; estigmatizar los servicios públicos a escasos e inadecuados, cuando inclusive se tiene acceso a gas e internet. Estas solo por mencionar algunas de las características que se han venido replanteando con la nueva visión de ruralidad.
Con lo anterior no quiero hacer una generalización de todos los contextos, sin embargo y aunque muchas zonas rurales aun viven en el olvido, son muchas más las que a causa de la industrialización y diferentes actividades económicas atraviesan por un proceso de transformación simultánea en un sinnúmero de aspectos, incluida claro está, la educación.
Es por esto que el maestro debe estar preparado para asumir la multiculturalidad de cada contexto en el cual se desempeñe, pues aunque se desenvuelva en una zona urbana; hay ruralidad en el niño que viene de una vereda, hay ruralidad en el niño que para desplazarse hasta la escuela requiere de mucho tiempo, hay ruralidad en el niño desplazado, hay ruralidad en el niño que trabaja la tierra, hay ruralidad en el niño que ha sido afectado por la violencia… de esto se deducen dos ideas muy importantes:
· “en todo contexto hay tintes de ruralidad y el maestro debe estar preparado para ello”,
· “el contexto llega a clase con el niño”.
Y guardando relación con las anteriores ideas, propongo la siguiente frase para invitar a la reflexión:
“Los niños no son solo sujetos aisladamente, son una historia y un contexto que los preexiste, contexto que llevan consigo siempre”
María Daniela Gallego. Formación Complementaria Nivel III A
No hay comentarios:
Publicar un comentario